Aguardaba el turno. La sala estaba oscura, por debajo de la única puerta se escabullía un gemido. Sus huesos se apilaban con docilidad. Tenía una mueca pálida y las manos cruzadas en un ruego apóstata. Miraba al suelo. Las baldosas lustraban la tarde a través de las grietas abiertas. Había olor a desinfectante. El aire esterilizado le arremetía contra el pecho. Sudaba y una herida roja le mojaba la piel. Pronto lo llamarían por su nombre. Él era el último en esa procesión de butacas vacías del consultorio. Aliviado, mareado, contaba manchas en la pared: hematomas de humedad. Cerca, una mesa con revistas rotas. Más lejos, una pequeña ventana que miraba la tarde. Sentía miedo. Un papel se le arrugaba en el bolsillo del saco.
Para cuando la voz de esa mujer lo despertó, le quedaban horas.
10 comentarios:
Me has hecho sentir la desesperación de la espera.
Un beso muy fuerte.
Me imaginé la mugrienta consulta de un matasanos inhabilitado que opera en la clandestinidad a cambio de poco más de lo que cuestan unas botellas de whisky.
Besos.
yo siempre digo, si se que me quedan unas horas de vida, voy a la intendencia a hacer fila para hacer un trámite. no hay nada mejor
Me gustó mucho lo de "hematomas de humedad".
:)
...a mi me gustó la "ventana que mira la tarde". Me imagino la sala de un dentista y él tipo sentado esperando a que lo atiendan, con un puñal clavado en la espalda...
Un abrazo ensangrentado
Paso y leo tus relatos, una gota concentrada que muchos disfrutamos.
Saludos cordiales.
¿Horas para qué? Y pasaron las horas que le quedaban, y no pudo resolver esa duda...
Esto lo leí una vez en el servicio de un bar de copas: "La muerte está tan segura de su victoria, que te da toda la vida de ventaja".
Pues nada. A disfrutar de las horas que nos quedan.
Supongo que esas eran sus últimas horas, si no entendí mal.
Un gusto volver a leerte.
Besos.
letras, lectora implacable y querida
toro, este relato fue escrito en la espera de un consultorio...
chicosoquete, y pensar que hay gente que desperdicia toda su vida sin hacer un trámite... jaja
arcángel, gracias. Me pareció una imagen bastante descriptiva de la situación
fogel, genial, me gusta tu imagen más que estas! ;)
petrusdom, un placer su visita. Sigo trabajando para miradas como la suya ;)
desorden, horas para qué, la GRAN pregunta que no es capaz de responder ni la muerte...
peatón, la muerte es cabeza dura, yo me la imagino como una funcionaria...
máximo, exacto. Un gusto que pases, querido poeta.
A todos,
Abrazos. Perdonen el retraso en pasar a saludarlos por sus casas, no los olvido.
musa
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